Los pacientes que carecen de uno o varios dientes, o aquellos que tienen alguna pieza dental en malas condiciones de salud y que es necesario extraer, son los mejores candidatos para someterse a un tratamiento mediante implantes de carga inmediata.
La carga inmediata es una técnica implantológica empleada cada vez con más frecuencia en el mundo de la odontología y que consiste en la colocación de los implantes y dientes el mismo día en que se realiza la cirugía. El paciente se visitará primero con el periodoncista, que será quien le coloque los implantes, y posteriormente, el prostodoncista le colocará la prótesis dental. Todo en una única visita y sin necesidad de que el paciente tenga que dejar margen entre uno y otro procedimiento.
Un cambio en implantología
Aunque los materiales de los implantes dentales son variados, en el caso de la carga inmediata, los implantes dentales están compuestos fundamentalmente por titanio y tienen como función reemplazar las raíces de los dientes perdidos. La diferencia está, precisamente, en el tiempo de colocación.
En el protocolo antiguo de colocación de implantes se recomendaba esperar de 3 a 6 meses sin colocar una prótesis dental fija, es decir, sin colocar los dientes sujetos a los implantes porque ese era el tiempo necesario para que tuviera lugar la cicatrización y osteointegración.
Actualmente, sin embargo, este periodo de espera ya no es necesario de ahí que la implantología dental de carga inmediata sea un procedimiento cada vez más recurrente. Y es que, los protocolos de carga inmediata implican la colocación de una prótesis provisional fija en el mismo día de la cirugía de implantes, dejando al paciente sin dientes solo unas horas, el tiempo necesario para que el laboratorio o prostodoncista puedan confeccionar su prótesis.
Múltiples ventajas para el paciente
Además de por su comodidad, el éxito reposición de dientes fijos de forma inmediata atornillados a los implantes se explica por las muchas ventajas que tiene para el paciente, especialmente en cuanto a función, estética y fonética.
De hecho, el resultado estético, fonético y funcional del paciente es mucho mejor que con cualquier tipo de prótesis removible. El paciente puede hablar con mayor comodidad y comer con tranquilidad –aunque siempre va bien saber qué alimentos es mejor comer cuando se llevan implantes dentales–. Además el postoperatorio mejora ya que la prótesis no está presionando la encía.
Por otro lado, nos permite utilizar una prótesis fija provisional durante unos meses en los que el dentista puede evaluar la posición y forma de los dientes y entrenar al paciente de forma gradual en las técnicas de higiene más adecuadas para evitar posibles infecciones en los implantes. Usar una prótesis fija provisional unos meses es la mejor fuente de pruebas e información para elaborar la prótesis definitiva.
A la hora de llevar a cabo este tratamiento es clave seguir una planificación rigurosa para poder decidir antes de la intervención los implantes que se colocarán, en qué posición y hacer un pronóstico de la estabilidad primaria que conseguiremos. Además, es importante destacar que los implantes con carga inmediata tienen un porcentaje de éxito muy elevado cuando son realizados por equipos con experiencia, conocimiento y la tecnología más avanzada.