La aparición de los dientes de leche es una de las primeras señales de que nuestros hijos están creciendo. Ningún padre quiere que crezcan demasiado rápido, pero aún así, el primer diente de leche es un momento emocionante, además de un paso fundamental en su desarrollo.
Predecir a qué edad salen los dientes en un bebé es difícil ya que la naturaleza no es una ciencia exacta. Y, aunque algunos niños pueden presentar síntomas o molestias que nos alerten de su llegada, esto tampoco es del todo esclarecedor ya que en otros casos estos aparecen casi por sorpresa.
¿A qué edad salen los dientes?
De modo que no debes obsesionarte por encajar en tiempos correctos. El margen de edad en la que salen los dientes suele extenderse entre los primeros seis meses de vida y el primer año de edad. Aunque, como en todo, hay excepciones. Hay bebés que ya nacen con dientes (alrededor de 1 de cada 3.000), mientras que en otros la dentición –la salida y desarrollo de los dientes del bebé– se produce pasados los 12 meses.
Normalmente son los incisivos centrales inferiores los que aparecen primero, seguidos de sus homólogos superiores. Tras ellos, entre los 9 y 16 meses de edad aparecen los laterales superiores e inferiores. A partir de los dos años salen los colmillos, y por último, los morales. Antes o después, todos los dientes del bebé terminan por aparecer llegados los tres años.
¿Qué molestias o síntomas indican la aparición de los dientes?
Los síntomas o molestias que suelen mostrarse previamente a la aparición de los dientes de leche suelen ser:
- Aumento de salivación: Las glándulas salivales funcionan más deprisa para mejorar la ingesta de alimentos.
- Hinchazón y enrojecimiento en las encías: Puede provocar un comportamiento más irritable al bebé al ir acompañado de molestias.
- Fiebre leve: Ocasionalmente la erupción de los dientes puede provocar una leve fiebre. Sin embargo, no está comprobado científicamente y es recomendable consultarlo con tu pediatra en el caso de presentarse.
Cómo aliviar las molestias de la dentición
Los síntomas relacionados con la dentición del bebé no deben preocuparnos, pero sí debemos ser conscientes de que aparecerán para tomar medidas que los mitiguen.
Las molestias durante la aparición de los dientes del bebé suelen ser leves. Aún y así, podemos aliviar el dolor con mordedor adecuado o con alimentos y bebidas frías.
Una vez hayan salido, no olvides cepillar los dientes de leche desde el primer momento, y es que, aunque no sean los dientes permanentes, precisan el mismo cuidado que el resto de dientes.